(De cómo cada vez estoy más a favor de la gente que quiere (del verbo amar) sin hacer demasiado ruido)
No conozco demasiado a Roc -es amigo de un amigo- pero, por lo que he visto, Roc aparece y desaparece a menudo. Y cuando aparece, ves enseguida que es más majo que las pesetas, que cena contigo y habla y te cuenta y te escucha y le cuentas y te acaba acompañando a casa, como aquel día de la famosa cena mexicana, y por el camino, te sigue hablando y te sigue escuchando y se desvía y te deja en el portal y te planta dos besos y dice "Adiós!" sonriendo y se va. Y no sabes cuándo lo vas a volver a ver pero sólo tienes la sensación de que se había ido de verdad y para una temporada larga cuando, como ayer, aparece por sorpresa en un bar y te paras a contar los meses que hacía que no lo veías.
Entonces, le hablas de otra gente que sí que parece que se ha ido de verdad. Y él te escucha y cuando acabas de hablar, sonriendo, te dice: "No puedo decir nada porque yo también soy así".
Roc es así, sí, pero su mérito es la ausencia de drama tanto en los momentos de su partida como en los de su vuelta. El gran mérito de Roc es que hace que te sientas feliz cuando marcha porque él es feliz cuando marcha, y también cuando vuelve porque él también parece feliz de volver a verte. Aunque sólo sea un amigo de un amigo y tú no lo conozcas demasiado.
Lo mejor de tener amigos tan diferentes unos de otros es que te ayudan, muchísimo, a entender. (A enteder qué? Pues a entender! Entender! Y ya está!!).
dissabte, 19 de juny del 2010
dijous, 17 de juny del 2010
¿Es noticia que un tipo con peluca afro rojigualda esté muy triste porque pierde la Selección Española?
¿Es noticia que al portero de un equipo de fútbol le entreviste su novia y no se note nada-nada que es su novia?
Me he mirado cuatro periódicos, como todas las mañanas, y aún no me he enterado de cómo quedó el partido (de cuántos goles). Tampoco es que me importe demasiado, la verdad.
Estoy así como muy hartita de todo.
¿Es noticia que al portero de un equipo de fútbol le entreviste su novia y no se note nada-nada que es su novia?
Me he mirado cuatro periódicos, como todas las mañanas, y aún no me he enterado de cómo quedó el partido (de cuántos goles). Tampoco es que me importe demasiado, la verdad.
Estoy así como muy hartita de todo.
dimarts, 15 de juny del 2010
Un día murió la mujer de un amigo de Zizek. Zizek y sus amigos se sorprendieron cuando poco después, hablando con el viudo, vieron que la recordaba sin asomo de emoción, muy tranquilamente. Dice que pensaron que era un tío demasiado frío. Hasta que se dieron cuenta de que, siempre que hablaba de su mujer, tenía en la mano un hámster que había sido el animal favorito de ella.
... Y hasta que, un año después, el hámster murió y él intentó suicidarse. Dos veces.
Zizek hoy ha hablado del Comunismo como marco político en el que podrían gestionarse mucho mejor de lo que se gestionan ahora asuntos como el ecologismo o los derechos de autor. Ha dado unos cuantos motivos por los que él pensaba que recuperar el Comunismo podría ser una buena opción. Mientras hablaba del tema con gran pasión, yo he pensado que ese hombre podría ser capaz de estudiar a fondo, crearse una teoría y hablar durante horas sobre cualquier cosa, incluso sobre cualquier cosa y sobre su contrario, con la misma inteligencia y con una convicción indiscutibles. De hecho, vive de eso.
He estado a punto de levantar la mano y decir: "Zizek, una pregunta de sí o no (risas): esta idea del Comunismo como una opción de futuro, ¿no será ahora mismo tu hámster particular?" No lo he hecho porque he pensado que era una pregunta demasiado dura; mira qué le pasó al amigo de Zizek cuando murió su hámster.
He vuelto a casa preguntándome si el trabajo por hacer avanzar los conceptos un paso más allá en la historia del pensamiento, no será el hámster de todo filósofo. Si sí, no es un mal plan: puede ser una tarea más longeva que cualquier otro bicho y que cualquier otra persona siempre que el filósofo también lo sea, claro, porque los filósofos, como los hámsters, las ideas y las personas, también acaban muriendo.
(Yo, que recuerde y que sea consciente de ello, tengo ahora mismo tres hámsters. Además, me he blindado: son cosas. Dos son nuevas y están en activo, la otra funciona como recuerdo de una historia que ya superé; la guardo porque estoy muy orgullosa de no necesitar ya a ese hámster.)
... Y hasta que, un año después, el hámster murió y él intentó suicidarse. Dos veces.
Zizek hoy ha hablado del Comunismo como marco político en el que podrían gestionarse mucho mejor de lo que se gestionan ahora asuntos como el ecologismo o los derechos de autor. Ha dado unos cuantos motivos por los que él pensaba que recuperar el Comunismo podría ser una buena opción. Mientras hablaba del tema con gran pasión, yo he pensado que ese hombre podría ser capaz de estudiar a fondo, crearse una teoría y hablar durante horas sobre cualquier cosa, incluso sobre cualquier cosa y sobre su contrario, con la misma inteligencia y con una convicción indiscutibles. De hecho, vive de eso.
He estado a punto de levantar la mano y decir: "Zizek, una pregunta de sí o no (risas): esta idea del Comunismo como una opción de futuro, ¿no será ahora mismo tu hámster particular?" No lo he hecho porque he pensado que era una pregunta demasiado dura; mira qué le pasó al amigo de Zizek cuando murió su hámster.
He vuelto a casa preguntándome si el trabajo por hacer avanzar los conceptos un paso más allá en la historia del pensamiento, no será el hámster de todo filósofo. Si sí, no es un mal plan: puede ser una tarea más longeva que cualquier otro bicho y que cualquier otra persona siempre que el filósofo también lo sea, claro, porque los filósofos, como los hámsters, las ideas y las personas, también acaban muriendo.
(Yo, que recuerde y que sea consciente de ello, tengo ahora mismo tres hámsters. Además, me he blindado: son cosas. Dos son nuevas y están en activo, la otra funciona como recuerdo de una historia que ya superé; la guardo porque estoy muy orgullosa de no necesitar ya a ese hámster.)
dilluns, 14 de juny del 2010
Gran finde de vermuts y comidas improvisadas, cafés en el Poblenou, nuevas aficiones (ver foto), amigos que aparecen por sorpresa, viajes en metro de ponerse al día en diez minutos, tequilitas, amigas que cantan como ángeles, técnicas travestis que dan yuyu, papuchis que descubren la wi-fi...

Viva vosotros!

Viva vosotros!
divendres, 11 de juny del 2010
Las mañanas son raras-rarísimas. Primero, suelo resistirme a despertarme; si estaba soñando, en el momento en el que soy consciente de que estoy dejando de hacerlo, intento agarrarme al sueño y seguir. En seguida me doy cuenta de que no voy a recuperarlo, entonces, dejo marchar el sueño y empiezan a venir a mi cabeza datos más o menos concretos de la realidad. Generalmente, el primero suele ser darme cuenta si hay alguien o no conmigo en la cama. Si sí, me abrazo (qué bien vendría el feble "hi" catalán en este momento para este verbo) o busco un mínimo roce y me quedo así, todavía intentando agarrarme a la sensación de dormir. Si no, dejo que vayan viniendo a mi cabeza datos impepinables y muy de agenda: hoy es viernes, tengo que salir antes de casa, qué hora es? En este momento abro los ojos, me enfado si me he despertado mucho antes de la hora que me tocaba (esto suele pasar a menudo, si estoy sola en la cama). Siguen saliendo datos a la superficie: tengo que llamar a tal, hoy como fuera, igual me da tiempo de echar una siesta (es el sueño viendo cuándo va a poder volver a entrar), igual me llaman de tal sitio, ayer no me llamó tal persona. Calentar la leche, ducharme, me pondré tales pantalones, no se me puede olvidar la cinta; por eso tengo que ir antes. Arriba.
Esa es mi manera de despertar.
Hoy, además, y estos últimos días, me ha venido a la cabeza Susana. Pero, Su, estoy convencida de que vas a estar bien. Date unos cuantos despertares raros nada más. Ya verás.
Esa es mi manera de despertar.
Hoy, además, y estos últimos días, me ha venido a la cabeza Susana. Pero, Su, estoy convencida de que vas a estar bien. Date unos cuantos despertares raros nada más. Ya verás.
Subscriure's a:
Missatges (Atom)