Coger un capítulo entero y borrar todo excepto la cita sobre la que daba vueltas y que dio origen a todo ese capítulo.
Guardarse la cita para ponerla en la primera página.
No es que haya gente que sea buenísima escribiendo, es que hay gente que ha sido buenísima eliminando todo rastro de las chorradas que han llegado a escribir. Y disimulando después.