Sesiones inventadas #2
Cuando entro y Mar me pregunta ¿qué tal? nunca sé si es un saludo como otro cualquiera o si ya está trabajando.
-¿Qué tal?
-Bien.
-¿Sí?
-Sí, bien,
-...
-Ahora me he metido en un lío y estoy bloqueada.
-¿Qué lío?
-De trabajo. Me han encargado una cosa que no sé si sé hacer, pero les he dicho que sí y, claro, ahora esperan que la haga.
-¿Por qué piensas que no puedes hacerla?
-Porque no la he hecho nunca.
-¿Y por qué te la han encargado?
-Porque ellos creen que sí, porque conozco a gente, tengo amigos, no sé... pasaba por ahí. Mira, cuando este verano me quedé sin trabajo, decidí motármelo por mi cuenta. Tenía algo de pasta ahorrada, calculé los meses que podía ir tirando de eso y pensé que intentaría buscarme trabajillos para alargar el tiempo que podía estar sin buscarme otro curro de oficina.
-¿Cuánto tiempo podías ir tirando?
-Hasta Navidad. Pensé que hacia octubre me pondría a buscar un curro. Pero estamos a noviembre, me han ido saliendo cosas y no me tengo que buscar trabajo aún.
-¿Y cuál es el problema?
-Que no sé cómo lo he hecho.
-Pero ¿cuál era tu plan: vivir por tu cuenta todo el tiempo que puedas o acabar, sí o sí, teniendo que buscarte un trabajo estable?
-Trabajar por mi cuenta y, cuando no pudiera más, buscarme un trabajo estable o ir enlazando trabajitos. Es muy realista: las cosas están difíciles y yo puedo trabajar en lo que sea, no se me caen los anillos.
-Pero de momento no hace falta.
-Pero tampoco he hecho nada especial.
-Crees que tendrías que haber hecho algo más.
-Sí.
-¿Qué?
-Pensaba que a estas alturas estaría agobiada de pasta y no lo estoy, y tampoco he trabajado tantísimo para esto. Hay cosas por las que trabajo mucho más y me acaban saliendo mal. Para esto, en cambio, no he trabajado demasiado y me está saliendo bien.
-Dime una cosa para la que hayas trabajado mucho y te haya salido mal.
-Todo el rollo de las relaciones personales, por ejemplo.
-¿Cuál era tu plan, en cuanto a relaciones personales?
-Bueno, lo típico: hace años si me imaginaba en el futuro, me veía casada y a lo mejor con una familia. Lo típico.
-¿Y con el trabajo, te imaginabas que a estas alturas tendrías uno estable?
-Sí.
-Tú, ahora mismo, te imaginabas con familia y trabajo estable.
-Sí, pues eso, lo típico, ¿no?
-¿Lo típico?
-Bueno, lo que quiere todo el mundo.
-¿Tú lo quieres ahora?
-Bueno, pensaba que sí, que lo tendría.
-¿Pero lo quieres?
-Bueno, no estaría haciendo lo que hago ahora.
-Decías que habías trabajado mucho la cosa de las relaciones personales.
-Sí y ha sido muy frustrante algunas veces.
-¿Por qué?
-Porque me he acabado dando cuenta de que es una cosa que no dependende solo de mí y me he encontrado trabajando sola por algo que implicaba al otro pero que el otro no estaba dispuesto a trabajar conmigo.
-¿En algún caso has encontrado a alguien que quisiera trabajar contigo en esto?
-Si.
-¿Qué pasó?
-Lo dejé.
-¿?
-Bueno, era yo quien no estaba convencida.
-Repasemos: tu objetivo es tener una relación personal y un trabajo estable. Se te da la oportunidad de tener una relación personal estable y la rechazas; se te aparece la oportunidad de poder retrasar el momento de ponerte a buscar un trabajo estable y la aceptas aunque no estás segura de si lo puedes hacer.
-...