divendres, 3 de desembre del 2010

Ay, déjenme ponerme un poco cascarrabias.



Esto de la foto es lo que queda ahora de la fábrica Pamplonica.

Ustedes no lo entenderán pero el Pamplonica era la puerta de Pamplona cuando se llegaba por la carretera de Zaragoza. Uno desde el coche veía primero, a la izquierda, la torre de control del aeropuerto de Noain y luego, a la derecha, primero el Diario de Navarra y luego el Pamplonica. Y a partir del Pamplonica, ya era Pamplona: Avenida de Zaragoza y Plaza de los Fueros; Caja Rural y Vuelta del Castillo; estación de autobuses y lo viejo. Pamplona, Pamplona.

¿Saben a partir de qué ya será Pamplona ahora entrando por la carretera de Zaragoza? A partir de esto, según el Diario de Navarra: un nuevo parque de 25.000 metros cuadrados que se construirá en este solar y que dispondrá de un lago artificial con un géiser.

¡Un géiser! Un puto géiser que tendrán que apagar (esto, en el fondo, es una esperanza que yo tengo) de diciembre a febrero porque ya me dirán ustedes hasta dónde puede subir un puto géiser congelado.

A mí, no sé, pero tamañas intervenciones en el paisaje visual y urbanístico me hacen pensar cosas como ¿qué motivos llevan a alguien a pensar que lo que falta a la entrada de Pamplona y, por extensión, en el centro de un parque cualquiera, es un géiser? Y me gustaría que el día que presenten este géiser en sociedad, antes de que la Barcina esté a punto de apretar el botón o abrir el grifo o estimular la zona (no sé cuál es el mecanismo de activación de un géiser, la verdad) que dé paso al primer gran chorretón, algún periodista le hiciera esta sencilla pregunta: ¿Y por qué un géiser? A ver qué responde. Lo he pensado mucho y una respuesta que me satisfaría bastante sería ésta: "Es una plantada de cara de toda Pamplona ante el cielo cabrón. ¿No se pega todo el año lloviendo aquí? ¡Pues toma chorro de agua que te escupimos nosotros!" Tendría un cierto lirismo el asunto: todo el mundo sabe que escupir al cielo es una soberana estupidez pero qué gran chulería de respuesta, oigan.
Esta otra también me molaría: "Es que en Donosti también han hecho uno, pero la potencia con la que sale disparada el agua del suyo no llega ni a la mitad que la del nuestro". Más chulería. Qué grande y qué Villatripas de Abajo todo:



Pero mucho me temo que la respuesta sería un bobo "es que es bonito" y todos a sonreír y La Pamplonesa venga a amenizar el acto.

Un puto géiser en vez de la fábrica del Pamplonica.
Es el fin del mundo.

3 comentaris:

  1. Que bonito el Javier Krahe, algun dia le daré un abrazo.

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  2. En Ginebra? creo, también tiene uno, su lago es natural eso sí.

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  3. Sí, en Ginebra tienen uno. Y en Palma también. Habría que buscar quién comenzó esta moda absurda... Algún alcalde flipado con el oso Yogui o así.

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